miércoles, 26 de octubre de 2011

'El Bombero futbolísta' la evolución del juego del VCF de Unai, por fin!


Quién decía que el VCF no juega a nada? O que no sabemos a qué juega? Hoy hemos visto lo que tanto esperábamos, ya sabemos a qué juega nuestro VCF y lo que puede ofrecernos. El VCF de Unai Emery, por fin, ha encontrado un estilo reconocible y personal. Tras 4 largos años buscando el camino por fin se ve el fruto del trabajo.  Si hasta ahora el juego del VCF era insulso, a partir de hoy se instaura el estilo de juego 'charlotada', que si bien no da puntos, si que, al fin, entretiene y hace reir y disfrutar a la sufrida afición, que es lo importante.
Es la evolución y el fruto de tanto trabajo. A imagen y semejanza del famoso espectáculo de culto 'El bombero torero', el VCF de Unai ha descubierto por fin su vocación y su forma de juego, y ha presentado en sociedad 'El bombero futbolista' un espectáculo divertidísimo, lleno de equívocos, chanzas, guiños al público y diversión, mucha diversión.
Ya decimos que puntos no da, excepto hoy, precisamente el día del estreno, en que sin pretenderlo ni saber cómo, se ha conseguido una victoria que ha dejado un amargo sabor de boca a todos, por cuanto ha empañado el bonito espectáculo humorístico. Pero bueno, da igual, es lo de menos, lo importante es que el VCF de Unai ya tiene estilo, ya sabemos a qué juega, por fin vamos a difrutar viendo a nuestro equipo, y eso los aficionados lo agradecemos, que es lo importante.
Gracias a todos los profesionales, desde el presidente, entrenador y jugadores, por tanto trabajo y por no haber dejado de preocuparse por la afición hasta conseguir éste fantástico logro.
Amunt Valencia!

pd: Aviso que van a haber ostias para recoger las entradas gratis para Champions, yo avisaría a Protección Civil para evitar posibles disturbios en la recogida de entradas, porque la demanda puede ser brutal y las colas kilométricas.

martes, 25 de octubre de 2011

Un VCF marca Hacendado

Confieso que yo fuí uno de los que se ilusionaron, uno de muchos. Recuerdo cuando fuímos líderes del campeonato, que fue bonito mientras duró, pero fue muy poco. En http://redvalencianista.com/ se puso un encuesta preguntando si el liderato era circunstancial o el VCF de Unai era por fin un equipo sólido. Supongo que se impuso la prudencia, pero en el fondo casi todos albergábamos la esperanza de que por fin se hubiera encontrado un estilo y el carácter necesario para afrontar la Liga con la competitividad necesaria, y con ello garantías de disfrutar por fin de nuestro equipo.

Pero no, como tantas otras veces, era sólo ilusión. En apenas 8 jornadas hemos vuelto a ver al VCF de siempre, el de los últimos 4 años, limitado, blando, incapaz e incompetente (por falto de competitividad), un VCF decepcionante. En Liga y Champions las sensaciones son las mismas, somos un equipo que puede tener destellos de vez en cuando, pero en el cómputo global no pasa de mediocre. Y bueno, ya voy despertando del sueño, qué le vamos a hacer!

Ayer vimos un capítulo más de ésta monserga. El ATB se llevó un punto, y gracias que no fueron los 3. Y porqué? Pues yo es que ya ni culpo a Unai, al menos no a él solo. Emery es un entrenador de marca blanca, aseadito, resultón, vistoso a veces, puede dar el pego a algunos, puede hasta pasar por algo de más calidad en según qué circunstancias, pero no deja de ser Hacendado, una copia de menor calidad, más barato, más asequible, mediocre. Eso desgraciadamente ya lo sabemos, yo soy de los que he pedido que no siga desde el primer año, y espero que por fin este año deje paso a otro.

Pero además hay jugadores que son todavía más mediocres. Ayer me encendí mucho con P. Hernández, un tipo que iba para estrella y que hoy por hoy es un bulto sospechoso que no se entera de nada. El primer balón que tocó ayer se convirtió en gol del Athletic, todo un record. Después no dio pie con bola, un desastre absoluto, una castaña de jugador que a final de año se tiene que ir bien lejos. Mira que me gustaba Pablo, pero hoy ya reconozco mi error y creo que no es ni jugador de 1ª. Lo mismo que Mathieu, tan trabajador y honesto como patán. Y lo msmo vale para R. Costa, que si bien no merece ser juzgado por otras cuestiones, en el campo demuestra ser un peligro y estar a años luz de Rami. Por si fuera poco algunos fichajes deslumbrantes como Piatti son otro misterio insondable, parecen jugadores distintos a los que hemos visto en otros equipos. Así que ya no sé si es culpa de Unai o de ellos mismos, culpa de Unai que no sabe ni manejar, ni aprovechar ni exprimir una plantilla, o culpa del que la ha hecho, o culpa del que manda y decide en todo, pero si sé que con jugadores así es imposible ser competitivos, lastran demasiado al equipo, juegan para el rival.

Sin embargo Banega, el discutidísimo Banega, ayer estuvo casi excelso. Si hay jugadores que son 'el pulmón' de un equipo, o el cerebro, o el alma, ayer Ever lo fue todo a la vez, y sobre todo 'los huevos' del VCF. Trabajó a destajo, se echó el equipo a la espalda, se atrevió cuando nadie lo hacía, y gracias a él fue el punto rescatado. Bien es cierto que no es regular y debiera, pero dejemos al chico en paz de una puta vez, disculpemos sus pequeñas salidas de tono, olvidémonos de si es simpático o no. Debemos pedirle que haga lo de ayer y recompensar su esfuerzo, porque un tipo así es la diferencia entre el mediocre VCF de hoy y un equipo lamentable que se adivina por momentos. Seamos al menos mediocres, dejemos en paz a Banega.

Bueno, que si, Unai es culpable, pero lo es más el que le renueva año a año conformándose con esta miseria de equipo y además vendiendo jugadores clave, como si no fuera bastante limitado el hombre para restarle armas. Pero además, sobre todo, algunos jugadores, que debían dar un paso adelante, lo son más que nadie, porque al final las limitaciones del entrenador no tienen culpa de que algunos piensen que puerden salir a pasearse y triscar hierba como los borregos porque ya lo tienen todo hecho en el VCF. Así que no perdamos la memoria, tomemos nota, y a final de año obremos en consecuencia.

lunes, 10 de octubre de 2011

La mala reputación

Los jugadores de fútbol, como personajes públicos que son, tienen una imagen pública, que nadie, excepto sus allegados, sabe si se ajusta a la real o no, pero es la que tienen. Y esa imagen pública a menudo se basa en la primera impresión, o se apoya en hechos más o menos contrastados y a veces sacados de madre por puro sensacionalismo, o no, generando una inercia dificil de revertir. Y esto hace que tendamos a generalizar y verlo desde un mismo prisma condicionado y parcial. Bueno, este rollo es para introducir el tema de 'la mala reputación', parafraseando un conocido tema de George Brassens.

Hay jugadores que resultan simpáticos y otros no. Esto es así, tan cierto como la vida misma. Puede que en realidad esos jugadores sean simpáticos, o no lo sean, y de ahí que caigan mejor o peor, pero yo diría que no va por ahí la cosa. A diferencia de lo que suele suceder en la vida normal, en que solemos juzgar de primera mano, a los personajes públicos se les juzga 'de oídas'. Esto no es de ahora, ha pasado siempre, y seguirá pasando. Es muy posible que determinadas declaraciones, o una actitud puntual y concreta, o simplemente la forma de enfrentar las ruedas de prensa, les pase factura en cuanto a su popularidad.

Pero el factor determinante es que caiga mejor o peor a la prensa. Al aficionado normal las noticias nos llegan de la prensa que sigue al club, y en la mayoría de ocasiones aceptamos las consideraciones, postulados o incluso manías del periodista de turno como propias casi sin darnos cuenta, sin el menor intento de ser ecuánimes, y entramos al trapo sin valorar que mal podemos opinar de una persona a quien no conocemos en absoluto. Ojo, de la persona, no del jugador de fútbol.

Ricardo Costa cae mal, es así. No hay razones objetivas, que yo sepa, pero cae mal, igual que antes le ha pasado a otros muchos, o igual que otros caen bien y se les perdona todo porque sí. Y todo lo que diga o haga va a ser criticado en base a esa antipatía. Y no es que defienda a Costa en particular, al que no conozco, ni por supuesto defiendo lo dicho en el desacertado comunicado de hace unos días, pero sí digo que todo se radicaliza cuando se trata de esos jugadores que caen mal.

Costa no es tan mal defensa como dicen por ahí, a mi al menos me parece un central aprovechable para el VCF, pero esto por supuesto es discutible. Como poco es un central interesante, que hoy por hoy es suplente con toda lógica por la gran forma de R&R, pero que puede ser muy útil a lo largo de una temporada. Es un tipo con personalidad, fuerte, y quizá no tan expeditivo o atento como debiera, pero no un paquete, como quieren hacerlo algunos. Y me da lo mismo si es o no simpático, o lo que digan los que se empeñan en hacerle más antipático de lo que seguramente es. Y es que en su caso se mezcla la crítica a su desempeño futbolistico con la animosidad a la hora de juzgarle, y al final se pierde la perspectiva. La mala reputación le pasa factura, algo que se repite demasiado en Valencia, y nunca de forma espontánea.

Opinar sobre el juego de determinado jugador es sencillo, lógico y lícito, todo tenemos ojos para ver y alma de entrenador para opinar de fútbol, que es lo que mueve esta pasión al fin y al cabo, pero hacerlo sobre las personas que están detrás de los futbolistas sin realmente conocerlas es absurdo, y me hace pensar que determinados personajes, conscientes o no de lo que hacen, son injustos a menudo, cuando no interesados e incluso vengativos.

Cada día es más difusa la línea que separa la información de la opinión, y entiendo que es dificil discernir cuando se trata de una cosa u otra, pero haríamos bien en no aceptar las simpatías o antipatías de otros como propias para juzgar a nadie, porque entonces estamos desvirtuando el puro debate futbolístico y mezclando churras con merinas, lo que no es justo ni razonable, y en cierto modo haciendo el juego a esos que pretenden consagrar a sus amigos y perjudicar a los que no lo son.

domingo, 2 de octubre de 2011

Un gol contraproducente

El VCF ha conseguido una victoria pírrica ante el Granada, equipito blando y limitado a más no poder, pero que incluso ha estado cerca de empatar cuando han visto que el Valencia les perdonaba la vida. Llego ahora mismo de Mestalla, algo 'descentrado' por el humo generado por 2 aficionados que había a mi lado y que se han pasado todo el partido fumando maría, pero de principio a fin, un prodigio. No sé como fumarían los carreteros, pero mucho tendría que ser para fumar más que estos dos. El caso es que he salido disgustado por el partido que he visto y medio mareado por la niebla de mis vecinos, pero por el camino he cambiado mi punto de vista y ahora soy hasta un poco comprensivo con lo que ha pasado esta noche en Mestalla.

Para mi el gol tan tempranero ha sido contraproducente. El VCF lo ha visto tan fácil, ha visto delante un equipo tan poca cosa que han pensado que iban a ganar sin esfuerzo y casi por inercia. Pero las cosas no han sido tan sencillas porque nunca lo son. Por decirlo así, cuando han podido no han querido, y cuando han querido ya no han podido. El Granada ha ido creciendo poco a poco, viendo la indolencia del VCF se han ido creyendo que podían sacar un resultado positivo, y como suele ser habitual, hace más el que quiere que el que puede, y a punto han estado de sacar un puntito que habría sido mucho más regalado por el VCF que conseguido por méritos propios. El partido ha sido malo, francamente malo, soso y deslucido. No recuerdo ver un partido con menos faltas que este. Ha sido tal la blandura de todos que las faltas cometidas por ambos se pueden contar con los dedos de la mano, algo realmente curioso y revelador. Iturralde ha hecho las mismas falta que el Granada, con eso está dicho todo.

Bueno, el partido no ha dado ni para muchos análisis. El caso es que el Valencia es claramente superior al Granada, de eso no cabe duda, y solo la facilidad aparente con que han pensado que iban a ganar ha hecho que casi pase todo lo contrario. De no mediar el gol de Canales en el minuto 3 al Granada le hubiera caído un saco de goles, o eso quiero pensar. Y de ello sólo tienen la culpa los jugadores, hoy no se puede culpar directamente a Unai, aunque ya he oído que también 'le dan'. Y no sé si opino esto por mi tendencia natural a llevar la contraria a todo el mundo o por que aun me dura el ciego. El caso es que tengo el día magnánimo, pero que no se repita, por favor.